Lo que todo el mundo debería saber sobre las habilidades motoras finas

¿Qué son las habilidades motoras finas?

La motora fina es aquella que está enfocada en las habilidades de hacer movimientos, utilizando los músculos de las manos, muñecas y dedos. Estos movimientos son tan naturales que por lo general nunca nos detenemos a pensar en ellos. Sin embargo, las habilidades motoras finas son muy complejas, ya que, involucran esfuerzos coordinados con el cerebro y los músculos, los cuales se desarrollan a partir de la motora gruesa.

Diferencia entre la motora fina y motora gruesa

 Problemas con las habilidades motoras finas

Si bien es cierto, todos los niños se desarrollan a un ritmo diferente, pero hay ciertos procesos que se alcanzan a edades determinadas. Esto incluye hitos en la motricidad fina. Por ejemplo, de los 3 a 4 años de edad los niños generalmente están iniciando su etapa de preescolar y con ella se enfrentan al manejo de los cubiertos, como atarse los zapatos, y abrocharse sus botones. A partir de los 5 años, los niños ya están preparados para cortar, pegar, y trazar formas identificables.

Sin embargo, hay niños que tienden a tener dificultades con estas habilidades durante mucho tiempo, por tanto, se recomienda que consulte a su pediatra o a un profesional enfocado en terapia ocupacional pediátrica.

Las dificultades con las habilidades motoras finas a menudo no se identifican hasta que el niño haya entrado a la etapa de preescolar y los maestros observan que están teniendo problemas.

¿Cómo desarrollar habilidades motoras finas en casa?

Es muy importante recalcar que cuando un niño presenta problemas con sus habilidades motoras finas y éstas son identificadas a tiempo en la escuela, las mismas pueden tratarse, sin necesidad de acudir a un especialista en terapia ocupacional pediátrica, ya que los maestros son un apoyo fundamental durante el desarrollo de los niños. Sin embargo, estos procesos deben contar con el apoyo de los padres de familia o tutores encargados para lograr alcanzar los resultados esperados.

A continuación, se detallan actividades para desarrollar las habilidades motoras finas desde casa:

1.    Abrir y cerrar:

Más que actividad, este punto se centra en las tareas del día a día. Es muy importante dar autonomía e independencia los niños en actividades cotidianas. Esta es la mejor forma de asignar responsabilidades que impliquen desarrollar su motricidad fina.

Uno se acostumbra fácilmente a que otros le hagan las cosas. Y, los padres, e incluso maestros están acostumbrados a hacerlas para “no perder tiempo”. Esto es un grave error, ya que, si privamos a los niños de desarrollar sus habilidades motoras finas, no le hacemos ningún bien.

Habrá cosas que definitivamente los niños no puedan abrir o cerrar, pero debemos dejar que ellos practiquen con actividades diarias como las siguientes:

·         Abrochar botones y cremalleras.

·         Vestir muñecos y disfrazarnos.

·         Enroscar y desenroscar

2.    Foamy moldeable

Simplemente el foamy moldeable es una de las mejores formas de desarrollar la motricidad fina. Es frecuente utilizar la misma para el desarrollo de la fuerza de agarre, pero la verdad es que ayuda con muchas otras destrezas de la motora fina.

Comenzar por apretar y estirar la masa, posteriormente crear diferentes formas, al trabajar constantemente su manos y dedos se ejercitan y cuando llegue el momento de iniciar los procesos de lecto-escritura, los niños van a tener mayor facilidad para manejar los lápices, hacer los trazos de las letras y concentrarse.

El juego con el foamy moldeable les permite fijarse metas, desarrollar su creatividad y también favorece emocionalmente a conservar la calma.

Esta actividad favorece a la coordinación ojo-mano, la fuerza, el control y la precisión de los movimientos con sus deditos manos.

3.    Construir con bloques

La construcción con bloques más allá de un pasatiempo es una manera importante de desarrollar la motora fina, ya que los niños necesitan precisión, estabilidad de brazos y muñecas, además de la habilidad de tensión y extensión de las manos.

4.    Hilar objetos

La actividad con hilos, limpiapipas, elástico, en la que haya que coser, bordar o insertar objetos, entre otras cosas, necesitan de precisión y estabilidad. Los niños tienen que ser capaces de hacer movimientos del brazo, muñeca, manos y dedos para poder llevar a cabo su objetivo de la manera más satisfactoria. Además, en todas ellas se utiliza la práctica de coordinación ojo-mano.  

5.    Trazos

La motricidad fina es esencial en la lecto-escritura porque permite a los niños, no solo trazar las letras, sino ser capaz de seguir visualmente las letras y palabras que en un futuro tendrá que leer.

Por tanto, una buena práctica puede ser exponer a los peques a actividades que impliquen trazar, seguir letras o formas, o coger un lápiz y aislar los distintos grupos musculares involucrados en el proceso de escritura. Se puede realizar trazado con los dedos, rotuladores o tiza.

Ahora ya sabes cómo desarrollar la motora fina de los niños.

Autor: Aula virtual, Importadora Kikas.

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